miércoles, 8 de diciembre de 2010

Polvo y ecos

En el slencio de la oscuridad hagamos solemnes votos de piedad, para aquellos que ozan enfrentar al señor de los cielos, regocigaos en las alas del angel caido, y al final nuestro linaje renacera y volveremos a reinar con sangre y sudor...
El tiempo ya viene.